Primera Edición

Hidrógeno Verde

Energía limpia para un futuro limpio

Ökonomía, Green Pack

Huella empresarial

Soluciones sostenibles: Tangibles como un empaque

«La sostenibilidad, como concepto, resulta amplia y abarca múltiples ejes de acción. Pero, ¿qué sucede cuando el concepto pasa de la “teoría” a la “práctica”? Más allá de implementar este concepto como política corporativa, hay empresas que van un paso más allá y generan soluciones cumpliendo su compromiso más entrañable: cuidar el ambiente en el corto, mediano y largo plazo.

Encuestas realizadas en Europa prueban que el 75% de los consumidores piensan que los empaques sostenibles son más costosos que los comunes, por ello el reto va más allá de solo innovar: el ahorro, las mejores condiciones de trabajo para los colaboradores y una considerable reducción de plástico y materiales descartables motivan a GreenPack® a fabricar una gran variedad de empaques sostenibles que no solamente cuidan la calidad de lo que contienen, sino también el entorno.«

Para las industrias, la sustentabilidad no solamente es una meta necesaria, sino un reto enorme, en especial para la industria del embalaje. Según estudios realizados por la Fundacional de Sostenibilidad de Kantar, uno de cada dos (es decir el 50% de los consumidores) están interesados en ser más sostenibles, sin embargo, las necesidades cotidianas y la cultura de cada población se interponen, todas las pretensiones en este sentido encuentran su fuente en el factor económico.

La urgencia de adaptación y las cambiantes necesidades de los consumidores vuelven el reto mucho mayor, y GreenPack® es una compañía que innova en soluciones que van a la par de estos factores, e incluso un paso más allá, no solamente mediante la generación de políticas corporativas sino también con la fabricación de empaques sostenibles y prácticos.

El proyecto BLUE, por ejemplo, es una iniciativa de GreenPack®, que busca alinear los tres pilares de la sostenibilidad con las actualizaciones en la legislación, economía circular, carbono neutro, requerimientos ambientales y tendencias globales relacionadas con los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible). De esta forma se ha seleccionado una combinación de metodologías y estándares que permiten plasmar aportaciones para construir una ruta hacia la sostenibilidad hecha a la medida de los consumidores.

Láminas sostenibles, empaques y material de embalaje, son solo algunas de las propuestas de GreenPack® para el mercado, pero volverlas amigables con el ambiente es el desafío. En el caso de las láminas sostenibles, por ejemplo, vale recalcar que una lámina de embalaje común tiene alrededor de 20-23 µm. (micras) de espesor, esto por el largo total del tramo aplicado de manera manual en cada pallet podría suponer un uso de alrededor de 300 gramos de plástico de embalaje utilizado por pallet. Ahora supongamos que una empresa requiere envolver alrededor de mil pallets por mes, esto implicaría tres cientos mil gramos es decir unos 300 kilos. Si reemplazamos el tramo común por láminas eficientes como Greenfilm, que tiene solamente 8 µm. (micras), el mismo pallet consumiría 100 gramos es decir 100 kilogramos por mes, reduciendo en 200 kilogramos sus desperdicios.

GreenPack® propone a sus clientes e invita a todos las empresas y personas con las que se relaciona a usar y promover el uso de soluciones de empaque y embalaje sostenibles, es decir que sean económicamente viables, socialmente responsables y ambientalmente comprometidas. Es por ello que en su portafolio están presentes: GreenFilm (film de embalaje de bajo espesor), GripFix (antideslizante), que elimina el uso de plástico de embalaje, maquinaria especializada para optimización de tiempo y recursos y servicios internos de coembalaje y co-llenado, con el fin de eliminar el desplazamiento de productos reduciendo consumo de combustible, neumáticos, etc.

Todos estos productos contribuyen a los 3 ejes de la sostenibilidad y representan un interesante incentivo económico para su implementación y beneficio.

La sostenibilidad empieza por un compromiso de cada persona y empresa, al pensar, actuar y alinear esfuerzos, definiendo acciones concretas para emprender el camino hacia un mejor futuro para ellos, las personas en las que impactan y el mundo que esperamos tener.

El trabajo sectorial sinérgico también es clave: de parte de las autoridades se esperaría que se implementen medidas para incentivar a las empresas y a la población en general a adoptar una cultura de sostenibilidad, a través de educación desde temprana edad, en temas relacionados con medioambiente, respeto a los demás, y a la propiedad pública y privada desde enfoques económicos y morales.

Por otro lado, es fundamental que las políticas dirigidas a las empresas sean económicamente atractivas, por ejemplo, mediante incentivos tributarios, socialmente responsables y con disminución de trámites y tiempos que exigen a las personas esfuerzos evitables y ambientalmente conscientes con la eliminación de uso de papel y plástico.

En parte podría sonar utópico. Sin embargo, construir una ruta para políticas sostenibles es 100 % viable, ciertas medidas ya se aplican, pero todavía tenemos mucho camino que recorrer.

La historia adquiere un giro notable cuando las empresas se comprometen con adoptar prácticas de sostenibilidad que se vuelvan parte de la cultura organizacional, acción que derivará también en un cambio e inclusión de las prácticas de sostenibilidad en las familias de sus colaboradores y de todas sus partes interesadas: el efecto ocurre automáticamente cuando el primer paso emprende su marcha.

– Equipo Ökonomía Click